Las cauciones judiciales son garantías fijadas en diferentes leyes que pretenden servir al cumplimiento de obligaciones que surgen a cargo de una de las partes vinculadas en un proceso judicial o administrativo y, en este sentido, su origen y fundamento será siempre una norma.
Así pues, el objeto de la caución y el valor asegurado de la misma está determinado normalmente en la ley o, en su defecto, por la autoridad judicial o administrativa responsable del proceso.
Las cauciones judiciales cumplen diferentes propósitos dependiendo de la norma que sirva de fundamento para su expedición, beneficiando a las partes que intervienen en procesos judiciales o administrativos.